¿Qué necesito?

En este artículo voy a intentar incluir lo más básico que necesitas para hacer cerveza en casa. No voy a incluir materias primas, eso vendrá en las siguientes entregas, sino solamente aparataje. Dependiendo de la cantidad que vayamos a hacer, los tamaños de algunos de los instrumentos tendrán que cambiar para acomodarse a la mayor cantidad de líquido. Y aunque estos son los básicos, hay infinidad de chismes que se pueden utilizar. Vamos a ello:

  • Una fuente de calor, cocina u hornillo con capacidad para mantener la cantidad de agua que vayamos a utilizar hirviendo. No es importante que sea de gas o eléctrica.
  • Olla o perola para hervir el mosto (la verdad es que no me gusta nada llamarlo mosto, pero no se me ocurre otra palabreja). Dependiendo de la cantidad de cerveza que vayamos a hacer necesitaremos una más o menos grande, pero un mínimo sería unos ocho litros. Con este tamaño podremos preparar unos cuatro litros de cerveza de una vez, dejando espacio suficiente para evitar que se salga nada durante la cocción. Como norma general deberemos dejar un 30% de la capacidad de la olla sin usar.
  • Termómetro con un rango mínimo desde 10ºC (50ºF) hasta 100ºC (212ºF) y a ser posible rápido y de fácil lectura.
Termómetro en olla de 8 litros

Termómetro en olla de 8 litros

  • Fermentador de cristal o plástico apto para alimentación y no poroso. Los de la foto son garrafas de cristal con una capacidad de unos 3.8 litros (1 galón americano) cada una. No se debe llenar más de unas 3/4 partes para evitar que el tapón y el sello de aire se obstruyan en caso de una fermentación más violenta de lo normal. Una obstrucción haría que se generara presión en el fermentador hasta que cediera la parte más débil, normalmente el tapón, causando el derramamiento de gran parte de la cerveza. ¡Nunca se deben cerrar con tapón de rosca después de echar la levadura!
Seis fermentadores llenos de mosto con sello de aire de tres piezas, listos para poner la levadura.

Seis fermentadores llenos de mosto con sello de aire de tres piezas, listos para poner la levadura.

  • Tapón para fermentación con un sello de aire (airlock).  El sello de aire evita la contaminación que podría producirse por la entrada de aire del exterior en el fermentador. A su vez, permite la salida del exceso de presión causada por la generación de CO2 durante la misma. Los sellos de aire pueden ser de una o tres piezas y también consistir en un simple tubo de escape que va desde el tapón del fermentador hasta el interior de una botella o jarro lleno de líquido, asegurándonos que el extremo del tubo se mantiene siempre sumergido.
Fermentadores

Fermentadores de 4 litros con tapón y tubo de salida para el CO2. La espuma se genera durante la fermentación.

  • Botellas, chapas y chisme para poner las chapas en las botellas. Una vez hecha la cerveza la tienes que poder meter en algún sitio y las botellas son una gran opción. Después de la fermentación añadimos una cantidad de azúcar a la cerveza antes de embotellarla. Esto da un extra de comida a la levadura, produce una segunda fermentación y añade carbonación a la cerveza. Si no quieres usar chapas puedes comprar botellas con tapón de presión como las de Amazon a las que apunto, pero el precio parece bastante caro. También puedes reutilizar botellas de cerveza comerciales siempre que no lleven chapa de rosca. Simplemente lávalas con agua abundante después de beberlas y guárdalas boca abajo hasta que vayas a usarlas. Antes del uso tendrás que desinfectarlas.
    Otra opción son los tanques de CO2 y los barriles, pero requieren una inversión mucho mayor tanto en estos como en neveras especializadas para mantenerlos, grifos, etc.
Secador de botellas con botellas recién lavadas y desinfectadas, listas para el llenado

Secador de botellas con botellas recién lavadas y desinfectadas, listas para el llenado

 

  • Materiales varios como un embudo para facilitar echar el mosto en el fermentador, un par de cazos metálicos de los que todos tenemos por casa para remover el mosto durante la cocción y el enfriamiento y un cubo o barreño de plástico en el que desinfectar todo lo que vaya a estar en contacto con el mosto una vez que hayamos terminado la cocción.

Y eso es todo. En cuestión de materiales básicos no hace falta nada más, y aunque se podría hacer con algo menos esta es la lista que pienso que es indispensable. A partir de aquí, el cielo es el límite.

He añadido links a algunos de los materiales necesarios de Amazon.es, pero viendo los precios de muchos me doy cuenta lo complicada que puede estar la cosa en España para esto de hacer cerveza en casa. Mi recomendación sería que buscases una tienda especializada en tu ciudad, si tienes suerte de tener alguna, e intentases conseguir las cosas menos comunes allí, como las botellas, chapas, fermentador y tapón para la fermentación. En Madrid sé que Cervezorama vende al menos parte del material necesario y si algo no lo tienen en la tienda supongo que te lo podrán conseguir. Entre las cosas más comunes, como el embudo y los cazos, intenta evitar los plásticos a no ser que estés seguro que son aptos para alimentación y resistentes al calor. Tampoco utilices cucharas de madera ya que son prácticamente imposibles de desinfectar completamente.

¡Salud!

Un Comentario

  1. Pingback: Los ingredientes | Cerveza de Garaje
  2. Pingback: Cerveza casera en una hora (y poco) – La receta | Cerveza de Garaje

Deja un comentario